LA FUERZA

Se ve a una mujer rubia de semblante sereno, vestida sencillamente con un vertido blanco (pureza) adornado con una corona de flores en la cintura, en la frente lleva también una corona de flores y sobre su cabeza el signo del infinito (un 8 acostado) igual al que lleva El Mago, indica que la mente tiene el poder infinito.

Abre con sus manos limpias las fauces de un león que representa los instintos y deseos terrenales, está indicando que la moral y la pureza son más fuertes que la bravura de un león y que es posible doblegar al más fuerte con paciencia y cariño, ella cree en Dios y maneja los instintos perversos del ser humano, la mente es más fuerte.

Otros detalles, al fondo de la lámina una montaña color azul, unos árboles y el piso color verde. El color amarillo predomina en esta lámina.

La versión de Waite tiene como finalidad destacar que la razón debe gobernar y dirigir las emociones más básicas, es decir, la pasión y el deseo. La mujer representa la inteligencia consiente que se reconcilia con los instintos animales.

Esta carta está asociada, al signo de Leo.

Físicamente y afectivamente Leo gobierna el corazón, en tanto que la quinta casa del zodiaco se asocia a la creatividad, la ternura, los placeres y los niños. Encontramos dos conceptos básicos en la carta de la Fuerza: lívido y voluntad.

La Fuerza asociada con esta carta, no tiene nada que ver con la brutalidad o la violencia: es más bien la fuerza poderosa que emana de un corazón generoso y lleno de amor.

Lo primero que debemos hacer notar es que la fuerza en el TAROT de Marsella lleva el número 11 no el 8, y la Justicia que en el del Rider Waite lleva el número 11, en el de Marsella lleva el 8. Existe entonces un cambio de posiciones, este fue uno de los dos grandes cambios que introdujo Arthur Edward Waite en su tarot, el otro tiene que ver con el cambio de lugar y número del loco que lo dejó antes del mago y le puso el “0”; esto ha sido estudiado y parte de varias discusiones; ¡que ha sido por la Cabala! ¡Que ha sido por tratar de hacer coincidir con las características de los signos zodiacales y la astrología! ¡Que ha sido por la numerología! etc.,

Hay diferentes razones.

Para mi es solo, porque para lograr la justicia necesariamente tengo que pasar por domar ese león interno, para conseguir el equilibrio tengo que aprender a pensar socialmente y no pensar en forma individualista. Si el hombre comienza a discutir o a luchar partiendo de la premisa de que todos debemos salir ganando no habría luchas ni guerras, nadie gana con ellas, solo la bestia se alimenta de la falta de razón.

Mujer rubia vestida de azul con una capa roja. Casi sin esfuerzo, mantiene abiertas las fauces de un león dorado. Esta con unas sandalias porque se ven los dedos de los pies sobre una superficie. Sobre su cabeza lleva un sombrero que recuerda el del Mago, la primera Lamina del tarot.

En esta carta el león tiene varios seises en su melena, formando el “666” el número de la bestia, este león representa los instintos más profundos, sin límite alguno, los deseos carnales (no necesariamente sexo, estamos hablando impulsos) el salvajismo, la sobrevivencia por sobre todo, aunque tenga que comerse al otro, la destrucción, la ausencia de control, y en la fuerza, la bestia interior ha sido domada con pureza, con amor, con ternura.

El León es símbolo de poder, capaz de llevar al hombre a su más profundo estado edénico (relativo a Edén), pero esto pasará solo si se logra domar y para ello hay que tener conciencia de que el león existe en cada uno, esta conciencia es el primer paso para doblegar a la bestia dentro de cada uno.

El significado de esta carta no tiene mucho que ver con la fuerza física, si no con la fuerza interior, de la moral, del carácter, es por esto que es una mujer la figura central, puesto que se refiere principalmente a que se es posible domar la fuerza bruta (cuyo referencia principal es el sexo masculino) con la delicadeza (cuya referencia principal está depositada en la mujer) indica el triunfo del amor sobre el odio, es fortaleza de espíritu, dominio, confianza, presencia de ánimo.

En su sentido más común esta carta no guarda referencia alguna con la autoconfianza, aunque puede ser sugerida, puesto que se refiere a quien tiene como fuerza a Dios y de aquellos que lo han elegido como su refugio, pero esta seguridad es referente respecto a otro, a pesar de que ese otro está dentro de cada uno.

Cuando la fuerza, hace referencia a una persona esta es una persona justa y generosa. Puede ser alguien que hace una donación importante o alguien que le defiende. Es una persona que no puede permanecer indiferente cuando es testigo de una injusticia o de un acto cruel. Ella, hará todo lo posible, por ordenar las cosas.

Es una persona que es incapaz de aceptar una derrota o de encerrarse en una actitud negativa. Tiene una voluntad inquebrantable, y resplandece su energía inagotable que se percibe en su entorno.

Esta carta es señal de amor sin condiciones, capaz de domar al león con solo amor; la bestia, que es parte de la naturaleza, se entrega al ver la pureza en la mujer; nótese la inocencia que ella se enfrenta al león ¿será que es segura de sí misma? 

Nótese que no es solo que ella es más fuerte, la cola del león está demostrando que es derrotado, y acepta la superioridad del otro.

Ambos pisan en la esperanza y la fe.

La carta de la fuerza indica, realización, determinación, heroísmo, fuerza interior, dominio, amor por la naturaleza y búsqueda de control interno. Esta carta viene a decirnos, que poseemos la fuerza necesaria para superar cualquier situación si ponemos en esto, voluntad, fuerza interior, confianza y fe.

En algunos casos, dependiendo de las cartas que la acompañan se puede hablar de fuerza física al derecho, con resultados positivos. Pero lo primero que se presenta incluso por el color amarillo prevaleciente en la carta, es que es un trabajo mental y no físico.

Es posible que todo el problema se solucione con un poco de diplomacia.

 Son aquellas enfermedades producto de acciones pasadas que traen sufrimiento en la vida actual, entre ellas se encuentran los vicios, como tabaco, alcohol, drogas, así como por el uso, sin control de medicamentos psicótropos, utilizados en el tratamiento de disturbios mentales; la agresividad humana, como la violencia, la maldad, el secuestro, el estupro, el robo, el asalto, el terror, el homicidio, la explotación de los semejantes en sus diferentes modalidades; el suicidio, el sacrificio del organismo por privaciones inútiles y otras formas de agresión al propio cuerpo; el hábito de entregarse a pensamientos negativos, como los impregnados por emociones de odio, celos, envidia, rabia, tristeza, calumnia, maledicencia, melancolía, insatisfacción; la corrupción, en la liviandad, o en el mal empleo de las posiciones de responsabilidad social o administrativa, perjudicando a los semejantes y constituyendo mal ejemplo para la sociedad.

Estas faltas pueden haber sido cometidas por la propia persona o por sus familiares, ya que existen lazos familiares muy estrechos entre los mismos. Más allá de los vínculos familiares, las personas tienen relaciones colectivas. Ellas pueden haber ayudado o perjudicado a otras criaturas, razón por la cual, aparte del karma individual, existe el karma familiar y el karma colectivo. El karma colectivo se explica en el resultado de accidentes, catástrofes, muchas personas pueden estar envueltas en el mismo sufrimiento, sin ser por casualidad.

No es sólo la mano sembradora la que produce malos frutos. Ciertos comportamientos aparentemente inofensivos pueden ser dañinos a la propia alma, como el no-aprovechamiento de las oportunidades que le fueron proporcionadas durante la existencia terrena, generan, igualmente, mala cosecha en el futuro. Del mismo modo, la inactividad, la inercia, la ociosidad, la pereza física y mental, son igualmente nocivas al alma, que no puede mantenerse estancada delante de las leyes a las cuales está vinculada.

Extraído del libro:

ENFERMEDADES DEL ALMA

La fuerza, indica impotencia, debilidad, abuso, enfermedad, brutalidad, crueldad, rudeza, tiranía, manipulación, impulsividad, descontrol, amor solo pasional, relación amorosa basada solo en lo físico.  En este caso, sí podemos indicar que se trata de un problema físico, hablamos de golpes, incluso de una madre con su pequeño hijo, castigándolo con golpes, malos tratos dentro de la pareja, podría referirse a maltrato psicológico, daños a indefensos. Falta diplomacia.