EL DIABLO

La visión es muy similar, a la misma imagen presentada por las cartas de Marsella; esta carta muestra a un demonio, con grandes alas de murciélago, azules y desplegadas. Sentado sobre una piedra rectangular, a la que va adosada una anilla; desde la que se amarran dos gruesas cadenas, que a su vez atan desde el cuello a otros dos demonios, mucho más pequeños que el anterior y que están parados uno a cada lado de la figura central.

Respecto al demonio principal, este tiene en la frente dos celestes cuernos curvos, parecidos a los cuernos de un cabrito, hacia abajo; su cabeza tiene forma de triángulo equilátero con la punta también hacia el suelo, terminando en una frondosa barba color oro, en el mentón; una extraña boca con forma de arco hacia abajo también; con la frente arrugada como de molestia y ojos muy expresivos, redondos, sus orejas son los otros vértices del triángulo; posada en la frente, una de las puntas de una estrella de cinco puntas invertida.

La parte de los muslos y su sexo esta cubierto con una densa capa de pelos largos y amarillos.

En la mano izquierda el demonio lleva una antorcha encendida apuntando al suelo, de mango azul; y la otra, muestra la palma, en la que tiene una figura de cruz, y sus dedos separados como una letra “V”. Garra en sus pies.

Los demonios más pequeños, uno es femenino con cuernos blancos y cola verde que termina en una especie de fruto rosado, parece ser una flor. El otro, parece ser masculino, y su cola es de fuego.

La tierra y el fondo, son de un color negro profundo.

Vemos a un demonio hermafrodita,cornudo, con alas de murciélago azules, y garras en las manos y pies; parado sobre una media esfera dorada que posa sobre, un yunque que representa el mundo material; artefacto que tiene una argolla, a la que van atadas dos sogas amarillas, que atan a su vez a dos pequeños demonios cornudos, con cola. Es azul desde las caderas hasta los tobillos, con un cinto rojo en su cadera, y esta desnudo al igual que los otros. Su mano derecha levantada en señal de “alto” o “detente”, parece ser una advertencia; en su otra mano lleva una espada amarilla desenvainada, sin mango; como advirtiendo que está a punto de un enfrentamiento; y al no tener su mango, me indica que a pesar de que lo está pensando no hay límites en la guerra, es un enfrentamiento por poder mental y material (el color nos recuerda los oros; la espada, la mente).

Su cuerpo muestra simbologías de los cuatro elementos de la Naturaleza: los cuernos de venado son el aspecto negativo de Leo (Fuego, los Bastos); las garras de águila son la parte oscura de Escorpio (Agua, las copas); el cuerpo sólido y primitivo es el aspecto más oscuro de Tauro (Tierra, los oros); y las alas de murciélago son la parte oscura de Acuario (Aire, las espadas)

Macho a izquierda y hembra a derecha del personaje principal, estos pequeños demonios están, atados desde el cuello, con las manos en la espalda y sus pies particularmente extraños; parecen tener tres dedos o garras separados, como tratando de abarcar lo más posible de la superficie del suelo, para mantener el equilibrio, pues son pequeños en relación al resto del cuerpo. Se miran uno al otro, como buscando ayuda, tratando de encontrar en el otro una respuesta a su agonía (la esclavitud). Y en las cabezas llevan una especie de sombrero rojo desde donde sobresalen unas enormes y largas orejas y unos grandes cuernos azules.

Todo el cuadro esta sobre lo que podría ser la tierra color negro que define su límite hacia arriba con una franja amarilla y sobre ella que se define como el fondo o cielo violeta color de la calma, unión entre el rojo de la vida y el azul de la espiritualidad.

Su número tiene relación con lo sexual. El cinco es el número de los sentidos. Esta carta está indicando que estamos amarrados a los deseos del cuerpo, y que esto está siendo más importante que nosotros mismos. Que estamos perdiendo nuestra individualidad.

Esta carta viene a representar las fuerzas de la naturaleza, tanto en su aspecto positivo como en el negativo, y a su vez, el antagonismo entre el bien y el mal. Que contiene más misterio.

Ahora bien; la carta tiene otros significados; señala que se conseguirá el éxito en el aspecto material, siempre que se sigan los dictados de la razón, ya que quien sigue sus instintos sin pensar racionalmente, se puede convertir en esclavo del devenir fatal. Y allí viene el siguiente significado “la esclavitud”.

El demonio o el Diablo, que es el nombre de esta carta, siempre me ha parecido una carta muy particular, que extrañamente a lo lógico es una imagen intimidante, que incita a no verla, o a negarse a ella; sin embargo, mi primera impresión de este personaje, es que “fue el ángel más amado por Dios”, hermoso, atractivo, sediento de conocimientos “Y de poder”, que justamente por ello fue desterrado del reino de los cielos, su ego lo hizo sentirse igualito al Dios y esto lo hecho todo a perder.

Todo puede convertirse en una tentación, depende del adorno que le pongas

Antes que nada, necesito decir que esta carta debería ser más hermosa, tal vez la más bella del Tarot, puesto que significa aquello que nos hace perder la razón de lo atractiva. El Diablo usa sus armas, las más antiguas, su conocimiento de lo profundo del alma humana para atraernos, los deseos, anhelos, instintos, etc., y la belleza, para poder reconocerlo deberemos conocer sus trucos.

No ha dejado de ser un ser espiritual, claramente maléfico. Y esto lo indican los colores azules de los cuernos y las alas, o ¿esto también es un truco?

Cuando sale esta lámina en la tirada hay que desconfiar…

La carta indica una esclavitud emocional, es la carta de relaciones simbióticas y opresivas, de una relación sentimental en la que nos sentimos felices con el sufrimiento propio o del otro, “si nos tratan mal es porque nos quieren”. Puede tratarse de una relación en la que nos sentimos atrapados, sin salida, y no podemos o no sabemos salir de ella.

Ejemplo: las mujeres que luchan por la liberación femenina y que a propósito de esa lucha se concentran en no usar nunca más faldas o sostenes (independiente del hecho de que hoy en día hay algunos estudios que indican que el uso de esta prenda femenina puede causar cáncer). Esto indica una nueva esclavitud no usar algo que las clasifique como femeninas.

Ejemplo: hombre liberados que su mujer “no los manda”, se concentran en esa frase, sin considerar que tal vez la mujer nunca ha querido mandarlos, pero “no importa de qué se trate a él nadie lo manda”. Otra esclavitud, no hacer nada que los clasifique cono “macaveo”

¿O es al revés dueño de tus palabras esclavo de tu silencio?

Se ha dado lo mejor para lograr los buenos propósitos incluso llegamos a despreciar algunas posibilidades que se presentaron para no caer en esclavitud de la carta al derecho, y ahora estamos sufriendo la desolación, la mal intención, y nos sentimos injustamente criticados.

¿Es esta posición es una carta positiva, que anuncia iluminación, cambios para mejor, oportunidad de liberarse?

 Tal vez la respuesta es sí, pero no se puede confiar el diablo, la carta es engañadora por sí misma, y uno deberá confiar en el conocimiento que has logrado del Tarot, más nunca en tus instintos, puesto quela carta dice claramente que podemos cometer errores de ego, y el ego tiene mucho que ver con el creer – ser, tener, que siento-. Por lo que digo, es tal vez la única carta del tarot que el lector deberá ajustarse exclusivamente a lo que ve en las cartas y la traducción lo más ajustada posible al estudio adquirido.

Los significados se mezclan y confunden al consultante; lo importante es que la situación inmediata mejora si es un asunto emocional y empeora si es material, Aunque los efectos a largo plazo pueden ser poco auspiciosos en ambos casos.